miércoles 1 de mayo de 2024
6.9ºc Comodoro Rivadavia

Movimientos involuntarios en la infancia

martes 06 de junio de 2023
Movimientos involuntarios en la infancia

Muchas mamis y papis creen que, porque su hijo tiene movimientos involuntarios, y, sobre todo, aleteos, eso significa que tienen un trastorno del espectro autista, en primer lugar, o cualquier otra patología.

Estos movimientos involuntarios se llaman "estereotipias". Y ¿qué son?, se preguntarán.

Son un tipo de trastorno del movimiento, sin ningún propósito ni intención, por eso son involuntarios, generalmente son rítmicos y repetitivos, al realizarse siempre de la misma manera, se los denomina estereotipados.

Estas estereotipias, generalmente no impiden que el niño realice sus actividades, aunque puede que hagan que las realice con mayor demora, aunque existen ciertos tips (estímulos distractores) para lograr que ellos desaparezcan en el momento que los están haciendo, algunos muy simples como, por ejemplo, llamarlos por su nombre.

Aunque esto sea común que suceda, los padres se llenan de ansiedad y preguntas cuando ven estas estereotipias, y entonces buscan inmediatamente un diagnostico que las justifique.

Solo hay que hacer un diagnóstico diferencial con trastornos complejos del movimiento, tales como mioclonias, distonias, movimientos coreicos o atetosicos. Estos movimientos impiden la realización de actividades y suceden continuamente en los niños.

Sin embargo, este tipo de estereotipias primarias simples son conductas que están dentro de los parámetros "normales".

Para ser más clara, en este artículo mencionaré algunas estereotipias simples que pueden aparecer en la infancia. Algunas de ellas no llaman la atención de los padres y otras los ponen en alerta:

  • Chuparse el dedo
  • Enroscarse el pelo
  • Comerse las uñas
  • Balanceo de tronco
  • Aleteos, palmas, chasquido de dedos
  • Saltitos mientras caminan, o correr en círculos

Simplemente, son algunas, las que he nombrado.

Mientras no estén acompañadas de otros signos o síntomas, puedan ser limitadas ante el llamado de atención de los padres y la toma de conciencia de lo que están haciendo, cuando tienen edad para darse cuenta, seguramente irán desapareciendo.

Si bien hay que estar atentos, no hay que estar siempre esperando lo peor, o buscando el diagnostico frente a cada movimiento involuntario repetitivo que aparezca.

Si están dudando, es conveniente quedarse tranquilos haciendo una consulta neuropediátrica, despejando sus dudas.

Te puede interesar
Últimas noticias