El avión monomotor desapareció el 6 de abril con sus tres tripulantes
Reactivan la búsqueda de la avioneta desaparecida con un sonar de Prefectura
Lamentablemente y luego de que la utilización de “cámaras de arrastre submarinas” había despertado esperanzas de poder ubicar a la avioneta, la tarea con los equipos del Cenpat -dependiente del Conicet- no lograron el objetivo deseado.
En cuanto al sonar, “entendemos que es el recurso óptimo para estas circunstancias”, señaló Mazzei explicando que “vamos a empezar a escanear el lecho marino desde el punto que tenemos hacia la profundidad del mar”, con lo que se confirma que los datos más precisos sobre la última ubicación de la aeronave han sido sobre el océano.
Vale destacar que el dato de donde se realiza la nueva búsqueda se generó en el último punto de localización de uno de los teléfonos celulares de los tripulantes, a unos dos kilómetros de la costa de la localidad petrolera y a unos 48 kilómetros al sur de donde se estaban llevando a cabo los rastrillajes.
Del mismo modo, comentó que “creemos que el acuatizaje del avión se haya dado sin fragmentación y se haya inundado”, indicando que “mantenemos la moral alta y la expectativa de encontrar algo”.
Con esta decisión, los mayores esfuerzos se centrarán en el rastrillaje del lecho marino, con lo que quedaría descartado -o con muy poco recurso humano en la tarea- la búsqueda en tierra, al menos en los sectores más alejados de la costa, tal cual se había realizado en los días posteriores a la desaparición del avión monomotor con tres tripulantes a bordo; Antonio Carlos de Castro Ramos, Jean Carlo Nercolini y Mario Enrique Da Silva Pinho.