Lidia Blanco: “Reivindicamos que el único camino posible es una Universidad gratuita, abierta, democrática y plural”

La rectora comenzó su discurso diciendo que “estamos conmemorando este primer cincuentenario en medio de un marco donde el sistema de educación superior argentino se encuentra atravesando una crítica situación”, expresó Lidia Blanco, subrayando la necesidad de reafirmar los compromisos suscritos en conferencias internacionales, como los de la UNESCO en 1998 y 2018 en Córdoba, que destacan la educación superior como un derecho humano universal y un bien público social.

En un llamado a la unidad y la responsabilidad compartida, Blanco señaló que los recientes acontecimientos vividos recientemente, ”nos hacen sentir cada vez más unidos en la responsabilidad de marchar a pesar de los embates, en la defensa de una universidad que reafirma con la educación en todos sus niveles ofreciendo lo mejor de nosotros en la docencia, la investigación y las prácticas de extensión”.

“Es el tiempo de construir nuevos puentes que permitan la emancipación social, económica, política y cultural en beneficio de nuestro pueblo”, agregó, destacando el papel crucial de la universidad pública en la construcción de una sociedad más justa y equitativa.

La rectora hizo hincapié en la historia de luchas que precede a la UNPSJB y en el orgullo que sienten por sus graduados, quienes contribuyen al desarrollo de la región patagónica y más allá. “Nos sentimos orgullosos de nuestros graduados y graduadas que ponen bien alto el nombre de la Universidad. Más de 12.000 graduados recorren toda la Patagonia dignificando sus profesiones día a día”, dijo.

Blanco continuó diciendo que “creemos en la capacidad igualadora de la educación pública y gratuita, en el poder transformador de la Universidad como formidable herramienta de movilidad social ascendente y en el aporte diferencial y sustantivo que la producción científica hace en la sociedad del conocimiento”.

A su vez, la rectora advirtió sobre los riesgos del desfinanciamiento y la desjerarquización de la ciencia y la tecnología, subrayando la importancia de invertir en estos sectores para asegurar un futuro próspero para Argentina.

“Sin ciencia y sin tecnología no hay futuro para Argentina. El desfinanciamiento y la desjerarquización inevitablemente impactará negativamente en el desarrollo de la ciencia y la tecnología y la innovación”, ponderó.

Casi al final de su discurso, y con un tono de emoción en su voz, señaló: “Me honra una situación particular y es ser la primera mujer que le ha tocado llevar adelante los destinos de nuestra querida casa, no ha salido fácil, no me resultó fácil y todavía quedan dos años complicados, no sólo por ser mujer sino por el sistema público de nuestro país y de educación que está en crisis. Es y ha sido una responsabilidad. Hacer de la universidad un lugar de reconocimiento y prestigio es un trabajo mancomunado, es una lucha compartida”, finalizó agradeciendo a su equipo de gestión y a su familia.