Un desafío cordobés para los amantes de los cerros
El Cerro Uritorco es el pico más alto de las Sierras Chicas del Valle de Punilla con 1.979 metros sobre el nivel del mar. Se encuentra ubicado a 3 kilómetros de la ciudad de Capilla del Monte y a 100 kilómetros de Córdoba Capital. Es un atractivo turístico nacional e internacional, por el desafío de alcanzar su cumbre y por el misterio de los fenómenos y leyendas que se le atribuyen.
El Cerro está abierto todo el año y ofrece diferentes actividades como excursiones diurnas, nocturnas, camping y trekkings. En el ascenso tradicional diurno, no pueden acceder los menores de 8 años ni mujeres embarazadas, mientras que los mayores de 60 años deben hacerlo acompañados por un guía. Si bien se puede subir hasta el mediodía, recomiendan hacerlo entre las 6 y las 10 horas, especialmente en verano, debido a que solo el 20 por ciento del recorrido tiene sombra.
Antes de emprender la travesía, es fundamental revisar sus redes sociales, página o acercarse a la base un día antes, para informarse acerca de las recomendaciones y equipo necesario. En un primer momento el listado puede parecer excesivo pero todo es útil en algún momento. Hay que llevar indumentaria cómoda, gorra, protector solar, 2 litros de agua por persona y alguna vianda, frutas o snacks.
En nuestro caso, pudimos registrarnos y abonar la entrada en la confitería, pero a partir de la implementación del protocolo COVID-19 el registro se debe realizar de manera virtual/digital. Después de asentar nuestra subida, nos indicaron el camino para comenzar. A escasos metros hay una pila de palos que sirven de bastones de trekking para aliviar la caminata.
El recorrido posee 6 descansos bien señalizados antes de llegar a la cumbre: Mirador del Caminante, Posta del Silencio, Hondonada del Buey, Quebrada del Viento, Valle de los Espíritus y Pampilla. En cada uno de ellos un cartel detalla la altura actual, distancia a la base y a la cima y el tiempo estimado hasta la próxima parada. El tiempo promedio de ascenso es de 4 hs y 3 hs de descenso, dependiendo del ritmo y tiempos de descanso o apreciación de cada paisaje. A medida que se asciende, las vistas de las sierras cordobesas y el silencio son cada vez más imponentes.
Entre el último descanso y la cumbre parece prolongarse el tiempo y la distancia, quizás por la ansiedad de estar cerca o por la predominancia de rocas que exigen pasos más largos y cuidadosos. Finalmente, una gran cruz y el cartel que anuncia la cima del Cerro Uritorco. La recompensa es una vista panorámica de Capilla del Monte, las Sierras Chicas y el Valle de Punilla. Aún en verano, se recomienda llevar una campera o rompevientos por el viento y frío de la altura.
A las 15 horas en invierno, o 16 horas en verano, todos los visitantes deben comenzar el descenso. A pesar del cansancio físico de haber caminado más de 12 kilómetros, el sentimiento de satisfacción de haber llegado a la cima y conocido este lugar es único, e indudablemente, una experiencia inolvidable para compartir y recomendar al regreso.
