Asesinan a balazos en la cabeza a un hombre, le roban y luego le queman la casa
Un integrante de una reconocida familia comodorense resultó ser la segunda víctima de homicidio en lo que va del año 2023 en esta ciudad. Juan Adolfo Laffeuillade tenía 80 años y lo encontraron tirado sin vida en el pasillo de su casa sobre calle Juan B. Justo al 200, donde policías de la seccional Segunda llegaron por un incendio.
El hombre había sido víctima de al menos dos disparos en la cabeza con un arma 9 milímetros. Se sospecha que se trató de un homicidio en ocasión de robo ya que según sus hijos, no se encontraba su camioneta Fiat Toro dominio colocado AA499IQ en el lugar donde habitualmente la estacionaba.
Se trata de un caso por demás difícil que le compete a la División Policial de Investigaciones -DPI- que procuraba buscar indicios en posibles cámaras de seguridad que hubieran en la cuadra de la calle Juan B. Justo - entre Fontana y Marchiori- situada apenas a dos cuadras de la avenida Hipólito Yrigoyen y frente al predio de la futura Ciudad Judicial, en la zona sur de la ciudad.
Macabro hallazgo
Alrededor de las dos y media de la mañana un móvil policial de la seccional Segunda patrullaba las inmediaciones cuando fueron advertidos por ocasionales transeúntes sobre un foco ígneo que salía del interior de un domicilio de Juan. B. Justo 230.
Cuando los uniformados ingresaron al patio trasero se encontraron con la puerta del garage abierta y también detectaron que una puerta trasera con acceso a la casa también se encontraba abierta, pero era ya tal la magnitud del incendio y la humareda, que se les hizo imposible ingresar a la misma.
Solicitaron la urgente presencia de los bomberos voluntarios. Éstos llegarían minutos después y en contados minutos sofocarían el fuego y constatarían con asombro la existencia del cuerpo de un hombre un pasillo interno, tirado en posición cúbito dorsal.
El hombre ya se encontraba sin vida, y al llegar personal de la policía científica comprobaron que presentaba al menos dos orificios de bala en la base del cráneo e incluso hallaron y secuestraron una vaina servida calibre 9 milímetros.
Se informó del lamentable suceso al fiscal Martin Cárcamo que dispuso el traslado del cadáver a la morgue judicial para practicarle una autopsia que determine las causas del deceso y la cantidad de proyectiles que impactaron en la cabeza y el cuerpo de la víctima.
La noticia causó conmoción en los hijos de Juan Adolfo Laffeuillade que fueron llegando al lugar y demás familiares.
Los investigadores policiales procuraban dar con cámaras de seguridad que permitan detectar imágenes del o los asesinos que posiblemente huyeron llevándose, entre otras cosas, la Fiat Toro propiedad de la víctima. También procuraban dar con posibles testigos que podrían ser sus vecinos, para saber cuándo fue la última vez que lo vieron o si observaron movimientos sospechosos de personas extrañas.
El segundo homicidio del año en un radio de pocas cuadras de distancia
En apenas 10 días se cometieron dos homicidios agravados por el uso de armas de fuego en dos lugares de la ciudad distanciados con escasas cuadras de diferencia. El del octogenario Juan Adolfo Lafeullade pareciera convertirse en un homicidio en ocasión de robo y la autopsia a desarrollarse en la morgue judicial determinará si recibió dos o más disparos de un arma de fuego calibre 9 milímetros ya que una primera versión daba cuentas de 6 disparos en la cabeza. Los hijos de la víctima manifestaron que muy posiblemente el o los homicidas se llevaron entre otras cosas, la camioneta Fiat Toro dominio AA499IQ que no estaba estacionada en su lugar habitual.
Esto ocurrió entre la noche del lunes o primeros minutos del martes 21 de febrero sobre la calle Juan B. Justo al 200 entre calles Marchiori y Fontana. Justamente, Juan. B. Justo es la continuidad -calles Arriba- de la avenida 13 de diciembre. El primer homicidio del año ocurrió la noche del viernes 10 de febrero no muy lejos del segundo: Sobre calle Alvear al 300, entre Vélez Sarsfield y Maipú. La víctima en este caso resultó ser un joven estudiante de Ingeniería de la U.N.P.S.J.B. que estaba próximo a irse a trabajar a una compañía minera en Santa Cruz: Emiliano David Ávila tenía 29 años, caminaba tranquilamente por la vereda después de haber estado con su novia y un amigo. Recibió dos disparos en la espalda desde el techo de una casa efectuados por Jorge Alberto Barberis (66), un ex cocinero del Ejército que dice haberlo confundido con otra persona que habría ingresado a su patio con fines delictivos.
El autor de los disparos se encuentra cumpliendo prisión preventiva y le secuestraron el arma de fuego tipo carabina calibre 22 LR. El primero de los casos fue resuelto en contadas horas, pero el homicidio de Juan Adolfo Lafeullade (80) se presenta como muy difícil para los investigadores policiales, que deben reconstruir las horas previas de la víctima para saber si mantuvo diálogo telefónico con alguno de sus familiares, amistades o si recibió alguna visita, entre otras cosas, y si aparece algún testigo que pueda brindar datos que lleven a identificar a el o los asesinos.
