miércoles 1 de mayo de 2024
3.9ºc Comodoro Rivadavia

Día de la Construcción

Los ladrillos de ostras marinas que inmortalizan a Comodoro

jueves 17 de noviembre de 2022
Los ladrillos de ostras marinas que inmortalizan a Comodoro

Allá por el año 1917 comenzaba a proyectarse lo que luego se instalaría como una de las fábricas icónicas de Comodoro Rivadavia. Se trata de la fábrica de ladrillos construidos a base de ostras marinas. El barrio Astra, también conocido como KM 20, fue el que cimentó este tesoro, que hasta el día de hoy viste las construcciones más simbólicas de la ciudad. 

El origen del barrio de Astra se remonta a junio de 1912, cuando un grupo de técnicos y hombres de la empresa Sindicato Petrolífero Astra Argentina formó una sociedad para explotar la zona. El barrio llegó a tener 1.500 obreros que se desempeñaban en distintas actividades, la mayoría inmigrantes de un crisol de nacionalidades. 

Siendo uno de los patrimonios culturales más importantes de la localidad, el barrio se caracterizó principalmente por la actividad petrolera, pero también hizo grandes aportes en la construcción de Comodoro Rivadavia.  

La fábrica de ladrillos de la Compañía comenzó a en 1918. Eran fabricados a partir de la molienda de ostras marinas. Fueron usados para construir edificios característicos como la Escuela N° 147 de Astra, la Usina Eléctrica, el Cine Teatro de Astra, gamelas y viviendas de diversos barrios, hasta incluso el emblemático Faro San Jorge. 

La fábrica 

En sus inicios, las construcciones de Astra fueron realizadas con madera y chapas de zinc. La primera con mampostería fue la cocina central, hecha con piedras labradas por los albañiles picapedreros en 1916. 

Luego, los mismos albañiles y el capataz construyeron la Administración de la Compañía (actual Biblioteca Popular) en 1917. Los demás edificios fueron elaborados con ladrillos comprados en el mercado local. Sin embargo, ese mismo año, el ingeniero Carlos Agote, presidente del Directorio, dio la indicación de que intenten con ostras fósiles. De este modo, hicieron un ensayo construyendo una pieza de 4x4 de ostra y mortero.

En septiembre armaron la prensa de ladrillo y la caldera de endurecimiento con sus cañerías de conducción de vapor y fue así cuando comenzó la prueba con la realización de treinta ladrillos, que salieron sólidos y resistentes.

Para 1918, la fábrica producía 59.000 ladrillos mensuales y 39.7 toneladas de cal. A su vez, eran comercializados, representando otra alternativa económica para los pobladores de ese entonces. De este modo, la empresa vendió ladrillos a grandes empresas, como la casa Lahusen de Comodoro Rivadavia y la Compañía Argentina de Comodoro Rivadavia en Km 8.

En la marcha de conocer el comercio y la zona, los trabajadores descubrieron que en invierno no se conseguía ladrillos y como la producción era constante, aprovecharon especialmente esta época para realizar muchos pedidos para las compañías vecinas. Asimismo, instalaron un molino para moler la cal y comercializarla en polvo, ya que, siendo procesada, era más económica y abarataba el flete.

Recolección de las ostras marinas

La extracción de las ostras se efectuaba en la cima del cerro Papagoikop, hoy conocido como La Caracola. El proceso de traslado era lento y dificultoso, por lo que instalaron un sistema de poleas horizontales en la cima del cerro con vías paralelas. Así, mediante un cable, las volquetas subían al cerro para luego regresar llenas de ostras hasta la fábrica. Según indicaron testigos de la época, para hacer el camino de los carros hubo que contratar a 150 hombres, con un trabajo 100 por ciento manual.

Además de vestir edificios patrimoniales de Comodoro Rivadavia, los característicos ladrillos se pueden apreciar en la mayoría de las viviendas de Astra que fueron construidos para los obreros y empleados. 

Con información del libro “Kampament” de Rodolfo Santellán.

Te puede interesar
Últimas noticias